Curando heridas. ReflexiĆ³n.
Las heridas siempre dejan cierta sensibilidad en la zona afectada.
El tiempo, los aƱos, van
limitando nuestras capacidades. En algunos casos somos mƔs
fuertes, en otros mĆ”s vulnerables. Al revĆ©s de cĆ³mo cuando Ć©ramos niƱos.
Cuando niƱos, aunque Ʃramos
mucho mƔs frƔgiles, nuestras heridas
sanaban mucho mƔs rƔpido y nuestra mente
olvidaba rĆ”pidamente la situaciĆ³n
que generĆ³ la herida.
De adultos las
heridas tardan mucho mƔs en sanar, porque perdimos elasticidad y porque se nos
hace difĆcil olvidar lo traumĆ”tico del dolor. El dolor incluso se hace mayor
porque se extiende el perĆodo de
cicatrizaciĆ³n.
Y cuando una herida resulta se produce donde habĆa cicatrices
previas, el dolor puede ser el mismo,
pero el periodo de sanaciĆ³n se hace mucho mĆ”s largo.
Pero lo mƔs maravilloso es
saber que estamos hechos con la capacidad de sanar.
Estamos previamente
destinados a poder regenerarnos a nuestro estado original. Es algo que debemos
aprender. Y la mejor manera de hacerlo es cuidƔndonos a nosotros mismos.
VaneMorĆ”n. Derechos Reservados 2010. ®
0 comments:
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.